En el año 1601, los miembros de la tripulación de un barco [de cuatro] perteneciente a la Compañía de las Indias Orientales, recibieron cada día, durante la travesía que hacían desde Inglaterra a la India, tres cucharaditas de zumo de limón. A la altura del Cabo de Buena Esperanza, 110 tripulantes de un total de 278 [en las cuatro naves], habían muerto de escorbuto. Aquellos afortunados que habían recibido su ración de zumo, por el contrario, permanecieron sanos hasta llegar al destino.
En 1795, es decir, 194 años después, la Real Armada Británica comenzó a utilizar cítricos, como las naranjas o limones, como parte regular de la dieta de las tripulaciones de sus barcos.
En 1865, 70 años más tarde, transcurridos casi tres siglos desde el experimento de la Compañía de las Indias Orientales, la marina mercante británica incluyó finalmente el zumo de cítricos en la dieta de los marineros, eliminando de esta manera el escorbuto.
Fuente: Business Dynamics, John Sterman, citado por Clarke Ching en el Yahoo CMSIG.