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07/18/2011

Comments

Mario López de Ávila Muñoz

Gracias por tu comentario, Jorge :)
Me alegro de que las cosas hayan salido bien y espero que el nuevo año te traiga aún más cosas buenas! :-)

Jorge Ruiz Royo

Hace dos años me lancé y me va bien. Ahora me doy cuenta de todos los riesgos que he asumido, y superan con creces los que calculé al inicio.
Me siento afortunado por no tener que sufrir a lo que ya estaba dispuesto.
Jorge Ruiz Royo, 37 años con tres hijos (1,2 y 4 años). www.arandipur.com

Qué haría ahora?...... Volvería a dejarme llevar. No podría vivir satisfecho con la espina de no haberlo intentado.

Suerte!!!!

Moisés Romero

Efectivamente el futuro que nos espera será el de trabajar por proyectos y cobrar en función de resultados, por lo que estoy de acuerdo contigo en que es bueno ir acostumbrándose cuanto antes a emprender (entendiéndolo como "ser el responsable de tu futuro profesional")

Mario Lopez de Avila Munoz

Ana, gracias a ti por tu comentario. Haces un trabajo más necesario que nunca!

Ana Pérez

Hola Mario, soy profesora de Empresa e Iniciativa Emprendedora, módulo presente en todos los ciclos formativos de Formación Profesional. Como intuirás, mi cometido es animar a los chicos por el camino del emprendimiento, no obstante lo cual creo que debo advertirles sobre los riesgos de emprender. Utilizaré entre otros tu post para reflexionar con ellos al respecto.

Gracias.

jartible

Mario, enhorabuena por el post: nada de mieditis, simplemente medicina preventiva para minimizar la tasa de mortalidad empresarial.

Gracias

iharro.com

Emprender es muy complicado, normalmente poco rentable y duro. Pero todo depende de uno mismo. A veces es mejor ganar menos y disfrutar que ganar 100.000 euros para tener una vida de 10 o 12 horas nefasta.

Hay grados, una emprende cuando se hace autónomo y colabora con algunos blogs, por ejemplo. No hace falta ser un gran empresario de éxito para ser un buen emprendedor.

En un futuro, probablemente, el trabajo por cuenta ajena indefinido sea un rara avis, y tendremos que ser capaces de trabajar para varias empresas a tiempo parcial o de autónomo en proyectos varios. Y mejor si nos vamos acostumbrando a este tipo de trabajo antes de que sea imprescindible.

Mario Lopez de Avila Munoz

Hecho. Invito yo :-)

Amalio A. Rey

Oye, Mario, te tomo la palabra. Nos debemos una buena birra para seguir charlando estos temas. Cuando vaya por Madrid, quedamos... vale?
Gracias por la reflexión :-)

Mario Lopez de Avila Munoz

Bueno Amalio, como dices bien, entramos en el terreno de la tertulia. Personalmente las prefiero a la antigua usanza, desvirtualizadas, con un buen café [tal vez, una copa] :-) Los dos tenemos nuestros años y nuestra experiencia y supongo que es difícil evitar que condicionen de alguna manera nuestra percepción de las cosas. "El fracaso no existe" ya lo repetía a mis clientes en el año 92, tras conseguir mi Practitioner en Programación Neurolingüística. Es muy bonito, sí, pero en mi opinión no es una idea que forme parte del ideario ibérico ni, si me apuras, latino [europeo]. Personalmente sigo repitiéndolo, un experimento nunca fracasa [sólo sería un fracaso si no aprendes nada] y una start-up no deja de ser eso, un experimento [tras otro]. Pero, por ponerte un ejemplo, las deudas con la Seguridad Social en España no prescriben NUNCA. Da igual lo que hayas aprendido, estás jodido y tu capacidad de levantarte y volverlo a intentar en muchos casos severamente dañada. Creo que esta crisis, más que humildad [a no ser que te refieras a Murdoch y él no se refería a la crisis] o atrevimiento genera baja autoestima y desesperación. Se parecen, pero no son lo mismo. Son, además, una combinación mortal a la hora de emprender.

Mi experiencia con emprendedores con el 'affordable loss' y el Plan B, desde hace dos años, en una docena de proyectos en toda España, es que les proporciona una muy necesaria sensación de estar al mando de las cosas. Saben que las cosas pueden salir mal y saben que eso no significará una tragedia. Mi experiencia me dice que les proporciona confianza, les permite centrarse en el desarrollo del negocio sin que las preocupaciones por el "qué pasará si esto sale mal" les distraigan. También ahorra muchos problemas entre socios. Y sobre todo, les permite retirarse en condiciones de volver a intentarlo más adelante, con la ventaja de lo aprendido. Es decir, les garantiza, de verdad, una segunda oportunidad.

Por último, el argumento de la creación de empleo es algo en lo que yo creo, no necesariamente algo en lo que tiene que creer o pensar siquiera el emprendedor. Jamás se me ocurriría echar esa carga encima de los hombros de ningún emprendedor, pero si existe la posibilidad de encontrar un diseño de su modelo de negocio que además de viable sea escalable, se lo indicaré y le animaré a que al menos considere esa posibilidad. Porque necesitamos empresas que crezcan. No solo viables, sino escalables. Y ya puestos: defendibles, esto es, competitivas. :-)

Desde luego estas conversaciones son mucho más agradables en persona y con un café :-)

Amalio A. Rey

Mario, tienes más razón que un santo, y lo bien que lo explicas. Me ha encantado lo del “affordable loss”, es perfecto. Por seguir la tertulia, solo permíteme añadir esto:
1) “Este es un país en el que aprender de tus fracasos sirve de poco, porque cuando se fracasa rara vez hay oportunidad [ni ganas] de repetir” = Yo creo que esta idea responde a una foto vieja, y deberíamos no creérnosla. Niego la mayor: tendríamos que empezar redefiniendo lo que entendemos como “fracaso”. Si eso lo hacemos sanamente, la cosa cambiaría. Creo, además, que está habiendo tanto “fracaso” con la crisis, que la gente empieza a comprender (tímidamente) que es parte del juego. En tiempos de lujuria financiera, fracasar era de incompetentes. Hoy ya sabemos que hay variables que nunca controlamos. Esta crisis genera humildad, y atrevimiento…
2) Mi experiencia con los emprendedores es que el Plan-B debilita habitualmente el Plan-A. Ya sabes, el impacto pernicioso de las “exit barriers” cuando son muy bajas. Si el emprendedor no tiene Plan-B, saca un extra de energía y de implicación que puede ser determinante: “no tiene otra opción”. Pero bueno, entiendo lo que dices, y está bien pensar en ello si entendemos al emprendedor como lo que es: un ser humano que se ilusiona, sufre y padece…
3) Mario, creo que hay que hablar de felicidad, o de satisfacción personal. No lo dejaría fuera nunca de la fórmula. De eso no hablan las incubadoras, ni los programas públicos, ni los inversores, ni quizás las escuelas de negocio… pero un consultor-artesano que valora la dimensión humana en todo, mete siempre ese ingrediente. En cuanto a las razones que apuntas para crecer, todas ciertas, está claro que si tienes que buscar financiación externa que no provenga de “friends-family”, debes garantizar escalado, ¿pero cuántos “negocios” sostenibles no necesitan financiación externa? Creo que hay muchos más de los que pensamos si quitamos del medio la figura omnipresente del inversor y los planes de negocio estandarizados… En cuanto a la segunda razón, pues mira, me desarmas… porque creo en la función del emprendedor como generador de empleo y de riqueza en un país. Es un argumento muy loable, pero tiene un pequeño riesgo: puede llevarnos a fabricar mártires. A la gente le tiene que apetecer y mucho… jugar a esas cartas. Me asusta la “función social” si primero no se desarrolla claramente una actitud y una vocación, y lo que es más importante de todo, no se profundiza en uno mismo para conocer las expectativas más genuinas que a veces no se explicitan. Gracias por la reflexión… y perdona el asalto…

Mario Lopez de Avila Munoz

Gracias por tu comentario, Amalio.
Como sabes, todo lo que se escribe o se dice admite matizaciones, especialmente si, como en este caso, quieres transmitir una idea por encima de otras [a saber: que necesitamos emprendedores, no mártires]. En estos años he tomado posiciones y/o colaborado en la puesta en marcha de varias empresas [cinco]. Unas van bien, otras no tan bien. Una de ellas está en situación pre-concursal. El proceso de cierre está siendo extremadamente doloroso, con un alto coste para mi socia, tanto personal como económico. Está siendo muy duro para ella y, puesto que es una persona que quiero, está siendo muy duro también para mí. Este es un país en el que aprender de tus fracasos sirve de poco, porque cuando se fracasa rara vez hay oportunidad [ni ganas] de repetir. Sin ir más lejos, la responsabilidad limitada aquí es una entelequia. Lo que pretendo con esta entrada es evitar mucho sufrimiento a miles de personas que no están en las mejores circunstancias o momento para emprender. No pretendo hacer un análisis neutral, quiero evitar tragedias. Y no a través del análisis [que conduce a la parálisis], sino al contrario, animando a probar, a experimentar... pero con cabeza. El párrafo más importante del texto es el último. Los emprendedores expertos establecen una "affordable loss". Desde hace dos años ningún emprendedor con el que hable o asesore empieza su camino sin establecer los límites que no va a cruzar. Dicho sea de paso, no soy el único que recomienda esta práctica: es habitual en inversores profesionales. Y está dando muy buenos resultados. En resumen, con respecto de tu primera matización, animo a que haya una reflexión y animo a probar, pero en condiciones controladas. Porque en el fondo sigo siendo un científico, que es para lo que me formaron - no "social", sino de las ciencias "de verdad" ;-) - y me siento cómodo hablando de aprendizaje, de experimentar, de probar... sabiendo muy bien lo que se hace.

Con respecto de la segunda matización, observa que en ningún momento hablo de la felicidad. Deliberadamente es un concepto que he dejado fuera. Sí hablo de que emprender es una experiencia que SIEMPRE te enriquece personal y profesionalmente. La felicidad es otra cosa y coincido contigo que no tiene que ver [necesariamente] con el TAMAÑO :-) Si hubiéramos coincidido alguna vez offline me habrías oído decir que el autoempleo es una opción perfectamente digna y que, desde luego, te puede hacer feliz. Pero hay dos buenas razones para apostar por el crecimiento. La primera, más cutre, es que si quieres financiación externa necesitas un proyecto capaz de CRECER, porque un inversor quiere ganar dinero, mucho dinero [en el menor tiempo posible] y para ello necesita apostar por proyectos que crezcan RENTABLEMENTE. La segunda razón es, para mi, de más peso: porque ESTE PAÍS NECESITA PROYECTOS ESCALABLES. Porque tenemos casi 5 MILLONES de parados y las grandes empresas, las empresas del IBEX 35, NO están creando empleo en España. Porque el autoempleo NO puede ser la respuesta para todas esas personas. Así que necesitamos proyectos ESCALABLES, para crear riqueza y para crear puestos de trabajo a lo grande. Y como aquí nadie tiene dinero, estas nuevas empresas están "condenadas" a salir fuera. Y como fuera hace mucho frío y la gente va con los cuchillos en la boca, tendrán que saber competir. Y no van a poder hacerlo por coste en la mayor parte de los casos, sino que tendrán que hacerlo diferenciándose a través de la innovación. Y todo eso aumenta enormemente la complejidad y la incertidumbre del proyecto. Y por eso el emprendedor que emprenda, tiene que hacerlo con cabeza. Y experimentar, sí, pero siempre con un Plan B.

Amalio A. Rey

Mario:
Muy buen post. Un resumen elocuente y didáctico para recomendarlo a cualquiera de mis (pre)emprendedores. Es importante que sopesen todo esto antes de tomar decisiones, así que va directo a mi Delicious.
Pero permíteme dos matizaciones:
1) Temo que tanta auto-evaluación lleve a la "parálisis por análisis". Esto tiene más que ver con los motivos para emprender y las capacidades/habilidades que uno cree que tiene. Las respuestas a esas preguntas pueden cambiar desde la propia acción. He visto muchos casos de gente que empieza a emprender solo por desesperación, moda, curiosidad o alguna de las razones por las que tu no recomiendas emprender, y entonces es cuando descubre que tenía el "bichito", o que era apto para hacerlo, y entonces ya no lo deja, o por seguir el símil que alguien te planteó aquí, la exposición a la enfermedad, ya la convirtió en crónica. En fin, que este "examen" para decidir no es algo estático, y puede valer la pena no hacerse tantas preguntas, y ponerse manos a la obra: saber si te conviene, probando... ¡¡y ya está!! Después de todo... ¿que se pierde? Pienso que la clave puede estar en la edad, porque si eres joven, nunca fracasas, solo aprendes. Ya con cierta edad hay menos oportunidades para recuperarse y es más posible que se produzcan dramas de los que uno se puede arrepentir. Por terminar te diría esto: "a veces se sabe si nos conviene/queremos ser emprendedores, emprendiendo..."
2) El segundo tema es mucho más complejo de explicar aquí. Es una "batallita" que tengo hace tiempo con los gestores de incubadoras, y con el sector ortodoxo de los formadores de emprendedores. Tú dices que "Si no creas 'equity', tienes un puesto de trabajo que, en la mayor parte de los casos, ni siquiera es un buen empleo: mucho riesgo, poca paga". Esto se asocia con el famoso mito del escalado. Yo soy crítico con que esa idea se plantee como un dogma. Pienso que se puede ser un "emprendedor feliz" (me gusta el término), sin obsesionarse con el escalado, ni en "crear equities". Las empresas se crean por una gran variedad de fines, y en mi caso, por ejemplo, me resisto a crecer sin una razón bien justificada, ni hago caso a los cantos del escalado... Como dice el bueno de Julen Iturbe, una cosa es crecer, y otra desarrollarse. Podemos "desarrollarnos" apostando por la calidad, y nadie podrá decirnos que somos menos emprendedores. Y honestamente, he sido siempre más feliz en estructuras pequeñas, contenidas... que en modelos centrados en equities..
Pues nada, perdona la extensión de mi comentario. Pero es un tema que me interesa..
un saludo :-)

Mario

Tienes toda la razón, esto es más una enfermedad que una elección! ;-)

Me alegro mucho de que te haya gustado - de hecho, algunas de estas cosas las reconocerás porque las hemos hablado tú y yo más de una vez [p.ej., lo del emprendedor 'de cocktail', que emprende porque mola decir que es emprendedor].

@keimstorm

Mario,
Increíble que nadie lo platee así... la cruda realidad... lo pondré como lectura obligada para mis emprendedores... pero de todas formas ya sabes que emprender no es una elección, es una enfermedad o un hobby, (no lo tengo muy claro aún...) un abrazo fuerte amigo... algunos pasajes me han parecido muy graciosos

Ana Pérez

Brillante. Será lectura obligada para mis alumnos de Empresa e Iniciativa Emprendedora.

Ramon

En España hay muchas barreras para emprender, es un deporte de alto riesgo. Pero hay quien le gusta hacer deporte y hay que no.
Creo que se deberia dejar un tiempo de margen al emprendedor hasta que consolide su posicion.

mdelacalle

Solo se te escapa una cosa, ¿y lo bien que nos lo pasamos? [a los que nos gusta]

Mario López de Ávila Muñoz

Gracias por los comentarios, chicos [y chica].
Ya sabéis lo que pienso - no hay recuperación posible sin el esfuerzo emprendedor. 'Esfuerzo', no 'martirio'. Este país no necesita más mártires.

Jorge M

Mario me encanta la claridad con la que expones el reto de emprender, felicidades por tu valentía. Es cierto que las ciscunstancias económicas actuales nos están llevando a muchos a replantearnos nuestra carrera profesional, una opción es "emprender" (como motor del autoempleo) otra salir corriendo (hay ofertas muy atractivas en el extranjero con unos buenos salarios aún en estos tiempos de crisis). Como ya he tenido la oportunidad de trabajar fuera durante bastantes años, no siento el "temor" que podría experimentar alguien de mi edad para hacerlo pero creo que lo que este pais necesita es que precisamente reactivemos la inactividad económica y el papel de los emprendedores y las empresas pequeñas es esencial. Tu claridad se echa de menos en el bonito panorama que pintan en las campañas de promoción de la iniciativa emprendedora. Precisamente ayer un emprendedor me contaba como tras un par de años de "empresario" estaba hasta las narices (el dijo otra cosa) de ser un ente recaudador del estado y no poder dedicar el máximo tiempo a su negocio. Conclusión: Hay que ser de una pasta especial para emprender...Gracias por ayudarles.

Pinkiplanka Planka

Pues a mi no me parece para nada realista. Me gustaría saber qué directivo cobra más 100.000 euros anuales sin tener presión de "arriba", sin tener que realizar muchos trabajos que no son "éticos" y sin dar explicaciones a nadie..
Yo soy emprendedor desde hace años, y sin duda es duro, pero también es enriquecedor. Te relacionas con mucha gente, peleas con los proveedores mayores descuentos, etc etc.. A mi, me gusta.
Y no gano ese dinero, ni tengo intención de ganarlo, no lo necesito. Ni tampoco necesito un BMW en mi garaje.
No conozco ninguna empresa que le pague las vacaciones a su empleado por "su cara bonita". Te las pagas tú, si quieres.
Mi meta es poder crear empleo, que personas o familias puedan vivir de mis logros, junto con los de mi equipo, sin duda.
Yo no necesito 8.000 euros al mes para ser feliz, porque el nivel de vida no lo voy a subir. Me permitiré un coche "decente", pero no un BMW ni un mercedes, por aparentar lo que no soy.Quizás con 40-50 años sí, pero no con 30, ni 35.
¿Qué hace esa gente con 100.000 euros anuales? Creerse quienes no son. Se lo gastan en cochazos (que muchas veces no pagan), en viajes con su pulserita "todo incluido", etc etc. Yo, invertiría en nuevas oportunidades.
Desde luego que hay muchas opciones, pero yo creo que este doc, no es realista como todos decís.

Roberto P.

Estoy de acuerdo, aunque creo que lo más importante es el talante personal y tener un compromiso y una motivación a prueba de bombas.
Si tu idea o tus servicios funcionan, si tienes sentido comun, espiritu austero y muchas, muchas ganas de trabajar tienes buenas posibilidades de salir adelante, pero como te desinfles al cabo de unos pocos meses, o años, acuciado por los problemas, mejor dejalo.
Entonces, efectivamente será más rentable, económica y personalmente, buscar trabajo por cuenta ajena.

Chisco

Qué bueno eres, Mario. Das en el clavo. Trabajo como asalariado, pero también pertenezco al grupo de los "profesionales libres" que ofrecen servicios actualmente demandados por la sociedad, sin arriesgar mucho por mi parte (hago el trabajo, facturo e ingreso el IVA correspondiente en Hacienda), cosa que un emprendedor sí que hace. Son los "héroes" de la sociedad.

Feliz verano. ;-)

Sergio Gago

Vaya... me has pillado! :)
Estoy totalmente de acuerdo con lo que dices, pero añadiría que a veces, cuando no tienes todas esas cosas, pero te sobra de una en concreto (ganas de aprender y perseverancia), puedes llegar a conseguirlo.
Un abrazo desde China, donde los negocios se ven de otra manera :)

Bea

Creo que somos varios (no me atrevería a decir que muchos) los que tenemos una idea, pequeña, eso sí, con la que empezar a hacer algo por nuestra cuenta sin tener que lanzarnos a la piscina como comenta Mario. El problema surge cuando ves que el sistema tributario te pone las mismas exigencias que si tu idea fuera grande, con lo que muchas ideas se quedan por el camino simplemente porque el miedo a dejarlo todo atrás es demasiado fuerte.

Has dado en el clavo de nuevo. Felicidades.

Joserra

Bravo por poner los pies en la tierra, lo pintas crudo, tal y como debe ser... supongo! :D

Salu2

Pablo

Muy buen post, Mario! Y aún así, vale la pena!!

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