Leí que Leonardo Da Vinci había dicho (también) algo parecido a "Piensa hacia dónde vas antes de comenzar". Pudiera ser que el gran Leonardo nunca hubiera dicho esto, pero la frase bien podría haber sido suya y, además, es una buena entrada para un post que trata de presentar un concepto central de TRIZ, que denominaré con su término inglés, Ideality.
A manera de resumen: a menudo nos ayudará, al abordar la resolución de un problema, definir como meta un hipotético Resultado Final Ideal en el que el sistema desarrolla su función con todos los beneficios y ninguno de los costes o efectos indeseados.
Lo "ideal" en TRIZ ocurre cuando una función útil es llevada a cabo por el sistema sin que se produzca ningún efecto indeseado (dañino o negativo en sí mismo). Lo "ideal" sería aquello que sólo retiene lo útil, sin llevar aparejadas consecuencias dañinas o simplemente no útiles. Dicho de otra manera, el sistema ideal sería aquel que, SIN EXISTIR, nos proporciona las funciones beneficiosas para las que ha sido diseñado. Los profesionales de TRIZ suelen decir que 'La máquina ideal es la que no existe', refiriéndose precisamente a esto.
En TRIZ, Ideality se expresa a través de una pseudofórmula, el cociente entre la suma de todo lo que es útil y la suma de todo lo que es dañino o simplemente inútil. Este ratio nos proporciona una medida hipotética de "lo ideal" de una solución.
Ideality = Suma Beneficios / (Suma Costes + Suma Efectos indeseados)
Cuanto mayor sea el numerador y/o menor el denominador, más cerca del ideal se encontrará la solución. Quede claro que este cociente no debe intepretarse como una expresión matemática literal, sino como una forma de representar la distancia desde la situación actual a un hipotético Resultado Final Ideal (IFR, por sus siglas en inglés).
Veamos un ejemplo muy citado en la bibliografía. Un laboratorio realiza para sus clientes, empresas metalúrgicas, tests de resistencia de diferentes aleaciones metálicas a la corrosión por un ácido. En el diseño tradicional de la prueba, las muestras eran situadas en un contenedor cerrado lleno de dicho ácido. Después de un período predeterminado, el contenedor era abierto y el efecto del ácido sobre las muestras determinado mediante una serie de mediciones. Por desgracia, el ácido también dañaba las paredes del contenedor. Se propuso recubrir las paredes del contenedor con cristal o algún otro material resitente al ácido, pero esa solución era costosa. Aplicando el concepto de Ideality, los técnicos del laboratorio llegaron al siguiente IFR: el contenedor ideal es el contenedor que no existe. La solución ideal expondría la muestra de aleación al efecto del ácido sin necesidad de usar ningún contenedor. Desde ahí, la solución fue evidente para todos: la propia muestra, debidamente mecanizada, se utilizaría como contenedor del ácido. Esta solución proporciona un beneficio adicional, porque el tamaño del contenedor deja de ser una limitación al número de muestras que son analizadas simultáneamente.
Aunque es muy posible que conseguir el Resultado Final Ideal sea imposible, la experiencia demuestra que perseguir lo "ideal" en los primeros momentos de abordar un problema inventivo, tiene beneficios inmediatos. En efecto, al definir un IFR, nos colocamos en la dirección más propicia para encontrar soluciones inventivas verdaderamente "rompedoras". Tener presente el resultado final ideal evita que nos movamos hacia soluciones menos ideales, nos ayuda a sortear las tentaciones de caer en compromisos poco satisfactorios y nos facilita el establecer con claridad los límites del problema. El IFR nos ayuda a liberar nuestros procesos mentales de los esquemas que han contribuido a crear el problema. En otras palabras, enfocando el problema desde un punto de vista de "lo ideal", reducimos la inercia psicológica que, en palabras de Altshuller, es el principal obstáculo a superar en la búsqueda de soluciones inventivas. Todo esto se refleja en la formulación de soluciones que nos conducen a sistemas más simples, menos costosos y/o mejor integrados con su entorno. [NOTA: La inercia psicológica se entiende como la tendencia que tenemos a seguir pensando en la misma dirección que hemos adoptado desde un principio, por motivos de confort y/o seguridad. Se puede afirmar que todas las herramientas de TRIZ están pensadas para acabar con esta resistencia interna].
Dos aspectos de "lo ideal" debemos tener presentes. El primero es que, si bien lo ideal es un concepto global, la solución o aproximación del problema depende de las condiciones locales. Los recursos disponibles son diferentes para personas diferentes en distintas localizaciones. La "solución ideal" para una situación dada es aquella que toma en consideración la disponibilidad de recursos y/o limitaciones locales. Cuando las funciones beneficiosas son llevadas a cabo por los recursos ya existentes, la solución es habitualmente no sólo menos costosa, sino también más elegante. [¿Alguien quiere poner en duda que las soluciones a nuestros problemas deban ser elegantes?]
El otro aspecto de "lo ideal" que debemos tener presente es que diferentes personas, o partes interesadas, tienen diferentes puntos de vista. El desafío que afronta la persona creativa, el innovador, es desarrollar productos o servicios que satisfagan las necesidades y expectativas de todas las partes interesadas. Deben ser tenidas en cuenta a la hora de formular el Resultado Final Ideal.
Si lo hemos definido correctamente, el IFR reunirá una serie de características, que pueden ser utilizadas como "lista de comprobación" para verificar su idoneidad. En primer lugar, eliminará las deficiencias del sistema original, mientras preserva sus ventajas. En segundo lugar, no hará más complicado el sistema requiriendo de la introducción de nuevos recursos, sino que utilizará preferentemente recursos gratuitos o fácilmente accesibles del propio sistema o de su entorno. Por último, es evidente, no debe introducir nuevas desventajas. Con relación a este último punto, puede ser útil recurrir al uso de la herramienta lógica Rama Negativa, que los habituales de este blog reconocerán como parte del 'toolkit' de los Procesos de Razonamiento de TOC, puesto que TRIZ carece, hasta donde alcanza mi entendimiento, de un instrumento similar.
Seis enfoques han demostrado ser útiles para incrementar la "Idealidad" de un sistema: eliminar funciones auxiliares del sistema; eliminar elementos del sistema (simplificar); identificar oportunidades de introducir el 'auto-servicio', en el sentido más amplio de la expresión, es decir, el de un subsistema que se sirve a sí mismo; reemplazar elementos, partes o el sistema al completo; cambiar el principio en el que se basa la operación del sistema y utilizar los recursos disponibles. Concretamente, el uso de recursos y del conocimiento de los efectos y leyes físicas relativas a los mismos, nos permiten resolver fácilmente al menos la tercera parte de los problemas inventivos a los que nos enfrentemos, según los cálculos realizados por el propio Altshuller.
Como ha ocurrido con otros muchos conceptos y herramientas de TRIZ, también "lo ideal" se utiliza a la hora de enfrentarse a problemas complejos en el ámbito del management. Sin ir más lejos, un IFR clásico del mundo de los negocios es la expresión bien conocida: "Others people time, others people money". Partiendo de este Resultado Final Ideal y usando los recursos de que dispongáis en estos momentos, así como el conocimiento de sus propiedades y comportamiento, seguro que muy pronto viviréis como pachás. De nada!
Pues muchas gracias. Tomo nota.
Posted by: Angel | 10/21/2007 at 10:38 PM
Genial, Ángel! No te olvides de compartir en LegnitaPress tus reflexiones... y cuenta conmigo si te puedo servir de algo (ej, de 'frontón' al que 'lanzar' tus ideas).
un abrazo!
Posted by: Mario | 10/21/2007 at 05:47 PM
Estoy reflexionando sobre cómo llevar estas ideas a la implantación de soluciones empresariales (ERP, CRM, SCM, ...) porque creo que tiene mucho sentido la eliminación de funciones auxiliares, simplificar,... Estoy en ello, madurándolo...
Posted by: Angel | 10/21/2007 at 07:44 AM